Introducción a la DSI (Doctrina Social de La Iglesia)

¿Por qué conocer la Doctrina Social?

Para encontrar en ella…§ Principios de Reflexión.
§ Criterios de Juicio.
§ El Compromiso Social
- Pretende ser un método orgánico para la búsqueda de soluciones en el discernimiento, el juicio y las soluciones de las complejas situaciones actuales.
- Pretende ser una guía para inspirar individual y colectivamente, comportamientos y opciones para el futuro.
- Se espera que de este pensamiento surja un compromiso nuevo con el mundo y espera ser un elemento de diálogo con todos los hombres.
- La iglesia espera con su doctrina social ofrecer a los hombres su contribución para alcanzar la verdad respecto del lugar que ocupa el hombre en la naturaleza y en la sociedad.
- Entonces la Iglesia pretende con la DSI: anunciar y actualizar el evangelio en la compleja red de las relaciones sociales.
- Por esto la DSI debe ser palabra que libere al Hombre y esto significa que posee la eficacia de verdad y de gracia del Espíritu de Dios.

 67 La doctrina social « tiene de por sí el valor de un instrumento de evangelización » 87 y se desarrolla en el encuentro siempre renovado entre el mensaje evangélico y la historia humana. Por eso, esta doctrina es un camino peculiar para el ejercicio del ministerio de la Palabra y de la función profética de la Iglesia.88
« En efecto, para la Iglesia enseñar y difundir la doctrina social pertenece a su misión evangelizadora y forma parte esencial del mensaje cristiano, ya que esta doctrina expone sus consecuencias directas en la vida de la sociedad y encuadra incluso el trabajo cotidiano y las luchas por la justicia en el testimonio a Cristo Salvador ».89
No estamos en presencia de un interés o de una acción marginal, que se añade a la misión de la Iglesia, sino en el corazón mismo de su ministerialidad: con la doctrina social, la Iglesia « anuncia a Dios y su
Misterio de salvación en Cristo a todo hombre y, por la misma razón, revela al hombre a sí mismo ».90
Es éste un ministerio que procede, no sólo del anuncio, sino también del testimonio.
Referencias
87Juan Pablo II, Carta enc. Centesimus annus, 54; AAS 83 (1991) 860.
88Cf. Juan Pablo II, Carta enc. Sollicitudo rei socialis, 41: AAS 80 (1988) 570-572.
89Juan Pablo II, Carta enc. Centesimus annus, 5: AAS 83 (1991) 799.
90Juan Pablo II, Carta enc. Centesimus annus, 54: AAS 83 (1991) 860.
¿Cuál es la relación entre DSI y Evangelización?
La iniciativa del Compendio se debe al mismo Juan Pablo II en persona, a quien, puede considerarse un verdadero refundador de la doctrina social de la Iglesia.  
El Papa encomendó al Consejo la realización del Compendio en el deseo de brindar a los fieles cristianos un instrumento formativo que les ayude a vivir las consecuencias sociales de la fe.
El mismo Pontífice dijo:
"sería muy útil un compendio o síntesis autorizada de la doctrina social católica" para mostrar "la relación existente entre ella y la nueva evangelización"[1].
Es decir que desde el principio el Compendio ha sido concebido como un instrumento al servicio de la misión salvadora de la Iglesia y no como un anexo temporal agregado a su naturaleza religiosa.

« En efecto, para la Iglesia enseñar y difundir la doctrina social pertenece a su misión evangelizadora y forma parte esencial del mensaje cristiano, ya que esta doctrina expone sus consecuencias directas en la vida de la sociedad y encuadra incluso el trabajo cotidiano y las luchas por la justicia en el testimonio a Cristo Salvador ».
La Iglesia es la “morada de Dios con los hombres”: por esto, el ser humano no está sólo o perdido en su esfuerzo de humanizar el mundo.
Con la DSI, la Iglesia busca anunciar el Evangelio en la COMPLEJA RED de relaciones sociales en el mundo.
La Política, la Economía y la Sociología no son solo “mundanas”, y por esto no son ajenas o extrañas a la DSI.
La DSI inspira proyectos de AMOR, JUSTICIA, PAZ y LIBERTAD para construir una ciudad más humana, porque es más conforme al Reino de Dios.

Siempre ha habido grandes vínculos entre Evangelización y Promoción humana: situaciones y problemas relacionados con la justicia, la liberación, el desarrollo, las relaciones entre los pueblos, la paz, etc.  

En Añatuya Jorge Gottau, el gran pastor, caminó cada paraje del Centro y Norte de la provincia, y logró la gran promoción humana de los desposeídos.

¿Qué valor tiene la DSI?
La doctrina social “tiene de por sí el valor de un instrumento de evangelización”[2].
Inmediatamente después se añade: "en cuanto tal, anuncia a Dios y su misterio de salvación en Cristo a todo hombre y, por la misma razón, revela al hombre así mismo.

Solamente bajo esta perspectiva se ocupa de lo demás: de los derechos humanos de cada uno y, en particular, del 'proletariado', la familia y la educación, los deberes del Estado, el ordenamiento de la sociedad nacional e internacional, la vida económica, la cultura, la guerra y la paz, así como del respeto a la vida desde el momento de la concepción hasta la muerte".

 

Brevemente, la DSI puede decirse "instrumento de evangelización" porque anuncia a Dios y el misterio de la salvación en Cristo a cada hombre, revelando el hombre al hombre.

Pero sabiendo que la DSI tiene su naturaleza, su tarea y su método, por el cual anuncia a Dios y el misterio de salvación en Cristo según su propia especificidad.

"La nueva evangelización”, de la que el mundo moderno tiene urgente necesidad y sobre la cual he insistido en más de una ocasión, -afirma Juan Pablo II- debe incluir entre sus elementos esenciales el anuncio de la Doctrina Social de la Iglesia, que, como en tiempos de León XIII, sigue siendo idónea para indicar el recto camino a la hora de dar respuesta a los grandes desafíos de la edad contemporánea, mientras crece el descrédito de las ideologías. 

LOS DESTINATARIOS DE LA NUEVA EVANGELIZACIÓN  

“Como entonces, hay que repetir que no existe verdadera solución para la 'cuestión social' fuera del Evangelio y que, por otra parte, las 'cosas nuevas' pueden hallar en él su propio espacio de verdad y el debido planteamiento moral"[3]. 

Referencias
[1] Juan Pablo II Ecclesia in America
[2] Juan Pablo II, Carta enc. Centesimus annus, 54; AAS 83 (1991) 86. Encíclica del 1 de mayo de 1991, a cien años de la primera encíclica sobre la cuestión social.
[3] Quadragesimo anno. Carta enciclica de S.S. Pío XI sobre la restauración del orden social en plena conformidad con la ley evangélica, 15 de mayo de 1931. 5.